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El misterio inexplicable del Mary Celeste

En Muchos Misterios conoce de este barco que quedó por siempre como una leyenda del mar, un misterio que existe hasta el día de hoy.

misterio inexplicable del Mary Celeste

El misterio del Mary Celeste

Navegó solo por el océano, su tripulación desapareció y nunca más se supo de ella. ¿Qué pudo pasarle a la tripulación del Mary Celeste? Una teoría obvia era que había sido abandonado repentinamente. Pero, ¿qué pudo hacer que un capitán experimentado abandonara un barco en condiciones de navegar?

El 4 de diciembre de 1872, la monotonía de la vida en el mar se vio interrumpida para los marineros a bordo por un acontecimiento que nunca olvidarían. Poco después de comprobar la posición de su barco a primera hora de la tarde, el capitán More house avistó otro barco a varias millas de distancia. Las velas que llevaba estaban orientadas de forma incorrecta para el viento predominante del norte y parecía estar en problemas. A medida que el misterioso barco se acercaba, el capitán lo llamó con una trompeta parlante, pero sus advertencias fueron ignoradas. Al no conseguirlo, envió a su primer oficial y a dos marineros en un bote para investigar. Al acercarse, vieron su nombre, Mary Celeste. Cuando subieron a bordo, sólo oyeron el viento en las jarcias y el sonido del océano golpeando el casco. No había ni un solo humano que pudiera verse a bordo.

Los marineros, entonces, comprobaron si había agua en la bodega. Aunque encontraron un metro y medio de agua, no era una cantidad peligrosa y podía ser expulsada fácilmente por las bombas, que estaban en buen estado de funcionamiento. A medida que exploraban el barco, el misterio se intensificaba aún más. Miraron por todas partes, pero parecía que los hombres se habían marchado y esperaban volver en unos minutos. Sus ropas, botas, dinero, navajas, pipas y otras posesiones personales seguían a bordo. Salvo la ropa colgada, todo estaba meticulosamente colocado.

El barco parecía tener una provisión de alimentos para seis meses y abundante agua dulce. En el camarote del capitán se había dormido y había pruebas de que una mujer y un niño pequeño habían estado a bordo. Ahora los marineros estaban aliviados de que no hubiera nadie a bordo, por lo que volvieron al Dei Gratia (nombre de su propio barco). No había ninguna razón convincente, pero supusieron que el Mary Celeste había sido abandonado. Su barco había desaparecido, al igual que los papeles y los instrumentos de navegación. De su cuaderno de bitácora se desprende que había sido abandonado diez días antes y que había recorrido entre 500 y 750 millas en solitario antes de ser descubierto. Entonces, el capitán Morehouse y el primer oficial intentaron llevar el Mary Celeste a puerto y presentar una reclamación de salvamento por el barco y su carga. Con sólo dos marineros para ayudarle, el primer oficial navegó con éxito el Mary Celeste hasta Gibraltar en la mañana del 13 de diciembre, llegando doce horas después que el Dei Gratia. Aunque resultaba extraño que un barco en condiciones de navegar y sin daños graves aparentes fuera abandonado, todo el mundo estaba seguro de que debía haber sido rescatado por un barco que pasaba por allí y que acabaría apareciendo y explicando todo. Sin embargo, esto nunca ocurrió.

Obviamente, esto no impidió que los investigadores idearan varias teorías, cada una tan vaga como las anteriores. El investigador jefe señaló a los hombres del Dei Gratia, acusándolos de haber asesinado a la tripulación para reclamar el dinero del rescate. Esto era difícil de probar. Además del hecho de que el capitán Morehouse tenía una buena reputación y el dinero a ganar no era tan grande, los dos barcos habían estado a cientos de millas de distancia a finales de noviembre.

Entonces decidió que tal vez fuera un motín y un asesinato. Como prueba, señaló algunas manchas de color rojo pardo en la cubierta y la barandilla, además de un pequeño corte en la barandilla que podría haber sido hecho con un hacha. También consideró que una vieja espada oxidada que se había encontrado en el camarote del capitán podía tener sangre.

El barco llevaba un cargamento de alcohol y un barril estaba dañado. Pensó que este barril de alcohol dañado podría haber provocado el teórico motín. Sin embargo, no había señales de ninguna pelea o embriaguez por parte de la tripulación. Por el contrario, todo estaba ordenado. A continuación se examinó la espada y se comprobó que no había señales de sangre en ella. Las manchas en la cubierta y la barandilla tampoco eran de sangre. Algunos pensaron que el barco podría haber sido conducido hacia una costa rocosa y los hombres, tras perder la esperanza de alejarse, abandonaron el barco. Después, el viento cambió y el barco se salvó, mientras que el bote salvavidas fue conducido hacia las rocas.

Un investigador posterior consideró que la clave estaba en los 1.700 barriles de alcohol que había en la bodega y en la escotilla de carga abierta. Tal vez el alcohol desprendió gas, que alguien olió. Tal vez incluso hubo una pequeña explosión y el capitán y la tripulación pensaron que el barco estaba a punto de estallar. Abandonando el barco por el pánico, debieron perderse mientras el barco navegaba por su cuenta. De ahí que la historia del Mary Celeste siga siendo uno de los grandes misterios del mar.

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